Casi ninguna saga está exenta de enfadarse por una cuestión monetaria. Incluso en una familia tan unida como la Kardashian-Jenner, en donde todo lo hacen juntas, ha habido complicaciones de este tipo.
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Todo comenzó cuando Kylie Jenner se alzó con el título de milmillonaria; concretamente, de la joven que antes había conseguido amasar su fortuna, superando al creador de Facebook, Mark Zuckerberg. Sobre todo, gracias a su empresa de cosméticos.
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Ahora, este nuevo título, constatado por la revista Forbes, ha generado algunas rencillas entre Kylie y su madre. La joven perdió la paciencia cuando Kris Jenner invitó a la oficina de su hija a Khloé Kardashian y a Scott Disick. Le dije que no se la enseñara a nadie hasta que pudiese hacerlo yo y se la pudiese enseñar de verdad ¡Es Kylie Cosmetics!, le quejó la empresaria ante su hermana Khloé. Cómo no van a verlo si la oficina ya está acabada y cuando subes, la puerta es de cristal y tiene mi logo, insistió la celebridad.
Pero como siempre ocurre en Keeping Up with the Kardashians, las cámaras nos ofrecen las dos versiones. Y esta vez no ha sido distinto. Kylie está siendo muy territorial. No sé qué está pasando, dijo la matriarca.
En la oficina, en frente de todos, me dijo, 'No se te ocurra volver a aparcar en mi plaza otra vez. Esto es importante para mí. He trabajado muy duro. Y yo me quedé como, Oh Dios mío. Tenía una importante videoconferencia y no me dejó entrar en la oficina porque tenía que trabajar'.
En este caso, su hija mayor, Kourtney se puso de su lado. Ella tiene como este privilegio... nadie le dice nada porque ella es Kylie la milmillonaria Jenner.
Pero la queja no acabó ahí: La oficina que alquilé y que pagué durante un mes y que pasé tanto tiempo adecentando para que esté perfecta , insitió Kylie.
En cualquier caso, la respuesta de Khloé fue devastadora. Mira, tía. No existen los amigos ni la lealtad cuando eres milmillonaria. Pues más claro...